En los últimos años se han realizado varias modificaciones al examen para acceder a estudios universitarios. Para esta generación, la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES), ha sido la encargada de medir las capacidades de los estudiantes sobre ciertas materias. Para esta fecha, aquellos que rindieron la prueba a fines del 2022, ya están matriculándose, y otros, utilizan este periodo para buscar nuevos horizontes y evaluar qué camino seguir.
Actualmente se presenta un panorama donde las carreras tradicionales coexisten con nuevas modalidades de educación, como lo son los institutos y cursos intensivos, que ofrecen la posibilidad de aprender y desarrollar conocimientos y habilidades en un menor tiempo. Un área que ha ganado terreno en los últimos años y se ha caracterizado por estar a la vanguardia, es la tecnología, que hoy es considerada como un sector más rentable y atractivo, considerando posibilidades de crecimiento, sueldo y proyecciones.
"El mundo de hoy se ha caracterizado por priorizar conocimientos y habilidades por sobre el cartón universitario. Por esta razón, es fundamental incentivar a los profesionales del futuro y entregarles las herramientas necesarias para que se logren adaptar a este nuevo escenario e ingresar a un mercado laboral en plena transformación digital”.
De acuerdo a las cifras entregadas por el Sence, un 70% de las empresas en Chile declaró requerir puestos vinculados a desarrollo, programación o analistas de software y de datos en 2022. Por otro lado, cifras de este mismo estudio señalan que se necesitan alrededor de 6.000 profesionales de TI en el país.
Es por eso que cabe preguntarse: ¿Por qué optar por habilidades vinculadas a la tecnología? En el contexto actual, donde la digitalización ya es parte de la mayoría de las organizaciones, no es posible mirar hacia el futuro sin la creación, desarrollo y aplicación de nuevas tecnologías. Esto genera que se necesite una mayor cantidad de profesionales en esta área, por lo que ofrecer buenas alternativas para su formación es una tarea urgente.
Si se retrocede unos años atrás, las carreras tradicionales eran las más valoradas y, sobre todo, el resultado final: el diploma. El mundo de hoy se ha caracterizado por priorizar conocimientos y habilidades por sobre el cartón universitario. Por esta razón, es fundamental incentivar a los profesionales del futuro y entregarles las herramientas necesarias para que se logren adaptar a este nuevo escenario e ingresar a un mercado laboral en plena transformación digital.
En esta época donde el foco está puesto en la educación y las puertas que puede abrir, es clave considerar nuevas opciones de formación, como los bootcamps de tecnología, que puedan entregar mayores proyecciones y empleos de calidad.