En cualquier negocio o sector, la diversidad de talento humano siempre será una piedra angular de la innovación. En particular, en el sector tecnología, esta pluralidad busca dar forma a una economía digital más inclusiva y competitiva, que abra oportunidades para que todas y todos desarrollen su potencial transformando mediante la innovación, el futuro de negocios, sectores y comunidades. En esta diversidad, la visión y talento de nosotras las mujeres es fundamental. 

El acelerado crecimiento del sector y una visión cada vez menos estigmatizada de los roles sociales de cada género, nos ha permitido a las mujeres un importante avance laboral y profesional dentro del mundo tecnológico.

Para las empresas, buscar esta equidad de género no solo debe ser una cuestión de hacer lo correcto y legitimar la lucha de las mujeres para mejorar sus espacios laborales, sino que conlleva razones económicas relevantes. De acuerdo con un estudio hecho por la UNESCO, la falta de participación femenina en la innovación tecnológica puede provocar pérdidas multimillonarias en la economía mundial, y por el contrario de reducirse la brecha, el PIB, sobre todo de regiones como la de Latinoamérica, aumentaría hasta en 4%.

Asimismo, el reporte El futuro de la tecnología: Inclusión femenina realizado por el BID Lab en conjunto con Laboratoria, (Institución regional que impulsa al talento femenino lationamericano dentro de la economía digital), aquellas empresas con más de 40% de mujeres en sus equipos tienen 21% más probabilidades de presentar un alto rendimiento en comparación con las que tienen menos de 5%. Mientras que aquellas empresas con un menor porcentaje de pluralidad de género muestran hasta 33% más resultados negativos que aquellas más diversas.

Ahora bien, la participación femenina incrementa notablemente la innovación, particularmente en desarrollo de software y diseño de productos. Las compañías con más equidad muestran más colaboración, compromiso y autonomía. Aquellas empresas que tienen un ambiente laboral más favorable obtienen hasta 17% más ganancias en comparación con el 13% que no lo tienen, según Laboratoria y BID Lab.

Falta de mujeres en el sector tecnológico

Los espacios para recibir a mujeres dentro de la industria tecnológica se ha abierto principalmente debido a la gran demanda resultado de la aceleración digital, las empresas se han encontrado con la falta de talento femenino, por lo que vemos como imprescindible generar en las mujeres este interés por profesiones y actividades relacionadas con la tecnología. 

De acuerdo con la UNESCO solo 3 de cada 10 mujeres en el mundo estudian carreras STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas), cifra que cae hasta el 8% en carreras de Ingeniería y al 3% en aquellas relacionadas con Tecnologías de la Información, y lamentablemente de aquellas graduadas menos del 10% logra emplearse en esta industria. 

Algunas de las principales causas que se han detectado por las que el número de mujeres en el sector tecnológico sigue siendo baja son: 

• Roles de género: el ámbito STEM se continúa percibiendo como un área de hombres, y las competencias tecnológicas están social y culturalmente definidas como propias del género masculino, mientras que las habilidades sociales siguen siendo propias de mujeres, el cambio de perspectiva genera en las mujeres incomodidad y miedo.
• Barreras educativas: Es bien sabido que los niveles de educación que alcanzan los hombres suelen ser más altos que el de las mujeres, debido a una condición de roles económicos y sociales. 
• Escasez de referentes femeninos: cuando se habla de tecnología, la inmensa mayoría de los referentes que vienen a nuestra mente son masculinos. La escasa visibilidad de la mujer en la industria tecnológica provoca que las niñas cuenten con pocos modelos femeninos en esta área. La visibilidad histórica que tienen los hombres sobrepasa por mucho a las figuras femeninas, por lo que repercute en que muy pocas mujeres se  vean dentro de la tecnología en un futuro.
• Sesgos de reclutamiento: se han identificado casos de sesgos arbitrarios en los procesos de reclutamiento, por ejemplo, en una enorme compañía de tecnología cuando ésta tuvo que retirar un software de reclutamiento que discriminaba la postulación de mujeres. La razón: el sistema de Inteligencia Artificial aprendió que los perfiles solicitantes eran predominantemente de hombres. Por lo que también es fundamental contar con sistemas de reclutamiento actualizados, que integren todos los perfiles y que no estén sesgados.

Tras analizar estas causas, para incrementar la presencia de las mujeres en la industria tecnológica será necesario continuar trabajando con el objetivo de que más niñas se interesen por estas profesiones mostrándoles modelos referentes positivos y dándoles la libertad de elegir un camino en el mundo tecnológico.

Las empresas en particular tienen la oportunidad y responsabilidad de atender este reto con acciones que favorezcan la formación de talento, el acceso y la permanencia de las mujeres en sus equipos de tecnología y el desarrollo de liderazgos que valoren la inclusión y diversidad desde un compromiso profundo. Para tal cometido se propone a empresas y organizaciones que buscan crecer el talento femenino en sus equipos de tecnología adoptar 5 recomendaciones concretas: 

1. Comprometerse con la diversidad e inclusión

2. Colaborar y tender puentes para que más mujeres accedan a formación en tecnología

3. Asegurar procesos de contratación inclusivos y libres de sesgos

4. Generar marcos de trabajo inclusivos donde las personas puedan desarrollarse y crecer

5. Convertir datos en acciones

El momento que hoy vivimos ha demostrado lo imperante que es mantenerse al ritmo de la revolución digital, la cual es inimaginable sin la participación activa de las mujeres. En la economía digital, el sector de tecnología es un espacio laboral bien remunerado para todas las personas, y para las mujeres, tener estas oportunidades resultará en empoderamiento económico y crecimiento profesional. A este impacto individual, se suma la oportunidad de que las féminas se conviertan en agentes transformadores, diseñando nuevas formas de vida y revolucionando el mundo.

La inclusión de las mujeres en la economía digital debe guiarse también por la idea de que al transformar el sector, no solo se están beneficiando a los negocios, sino contribuyendo a reducir la desigualdad social y propiciando el desarrollo económico de América Latina.