Al integrar un rol de UX designer dentro de tu equipo de trabajo tendrás ventajas difíciles de alcanzar de otra manera, aún cuando contrates una agencia de diseño o una profesional freelance.
Para crear soluciones exitosas es necesario conocer a profundidad tu empresa y sus clientes o usuarios, lo cual se logra a través del tiempo y el seguimiento continuo de los proyectos. Aquí te contamos los principales beneficios de tener talento UX in-house.
Satisfacción de tus clientes
¿Alguna vez has usado un app y sientes que te “leyó la mente”? ¿De pronto te descubriste diciendo “wow”? Dibujar una sonrisa en quienes utilizan los productos digitales es la meta de toda UX designer.
Mediante técnicas de investigación, se descubren necesidades y pain-points de quienes usan tu producto, generando insights clave para maximizar el aprovechamiento de oportunidades. Con el tiempo, tu equipo va acumulando conocimiento amplio y detallado del mercado.
Velocidad en la salida al mercado
Contar con tu propia ux designer permite ciclos de desarrollo ágil en el producto, experimentación temprana y colaboración interdisciplinaria, generando una dinámica de trabajo fluída en tu equipo que potencia el lanzamiento rápido de MVPs y su mejora continua.
Reducción de costos operativos
Un producto que resuelve satisfactoriamente las necesidades de quienes lo utilizan, reduce significativamente el volúmen de contactos que recibe tu equipo de atención al cliente.
Además, una ux designer también cuenta con la capacidad de colaborar en el desarrollo de herramientas para tu equipo interno. Esta es una ventaja particular que sólo puedes tener al incluir el rol de forma permanente en tu empresa.
Posicionamiento de mercado
¡Las buenas experiencias se comparten! Tus clientes van a recomendar activamente el producto si lo encuentran fácil de usar y les permite resolver sus necesidades efectivamente. La tarea principal de una ux designer es asegurarse que tu app o sitio web sea fácil de usar para todas las personas, integrando principios de accesibilidad y monitoreando constantemente la usabilidad de las soluciones.
Al ser parte del equipo, este seguimiento se convierte en una actividad de mejora constante, contrario a una agencia de diseño que entrega el proyecto y se desvincula de los resultados.