La manera cómo las empresas entregan valor requiere de interfaces y productos digitales que simplifiquen la toma de decisiones y atiendan las necesidades reales de las personas. El futuro de las empresas requiere de más y mejores Front-End Developers y UXers porque cada vez más nuestra vida sucede a través de la pantalla.
De acuerdo con el académico y consultor David L. Rogers en su libro The Digital Transformation Playbook, las empresas listas para esta época digital, deberán...
“Aprender a adaptar continuamente su oferta de valor. Lo que significa que deberán enfocarse más allá de su modelo de negocio actual y entrar a fondo a entender cómo entregar valor a sus clientes mientras las nuevas tecnologías reconfiguran las oportunidades y necesidades”.
No solo eso, vivimos en una sociedad que espera ya que las empresas brinden experiencias extraordinarias. Sus capacidades tecnológicas suelen ser la frontera que determina la calidad de estas experiencias.
Durante los 8 años que trabajé en una agencia de publicidad, me di cuenta de que el freno más grande para las ideas de los clientes y equipos creativos era la capacidad de desarrollo por parte del equipo de tecnología.
Era un reto constante dudar si podríamos cumplir con lo que los clientes estaban buscando y los dueños de las marcas querían para su negocio.
Y cómo me habría gustado contar en ese entonces con especialistas en Front-End y en User Experience (UX). La entrega final que hacíamos solía verse limitada por el modelo de trabajo de la agencia, que entregaba las tareas propias de UX a equipos no especializados y el desarrollo de los componentes de cara al usuario recaía en ingenieros más enfocados en la infraestructura de la solución.
Si bien es cierto que las empresas deberían tener equipos que atiendan cada área, en mi experiencia es clave contar con Front-End developers que puedan cuidar cada detalle de la entrega final. Esto ayuda a respetar los hallazgos de los equipos de UX y generar la mejor experiencia a las y los usuarios cuando hacen negocio con determinada marca.
Basado en los retos que recién compartí, aprovecho este espacio para enlistar algunos de los principios que he visto hacen de las Front-End Devs y las UX Designers especialidades altamente competitivas:
Un trabajo estrecho entre Front-End Developers y Diseñadoras UX también permite aprender, documentar y acelerar el entendimiento del usuario para desarrollar experiencias propietarias para cada marca.
En resumen, lograr estos principios requiere de habilidades técnicas pero también de capacidades de comunicación, resolución de problemas y colaboración que son el sustento para lograr objetivos comunes. Ambos aspectos suelen formar parte de la mentalidad de las egresadas de Laboratoria y así nos lo han hecho saber muchas de las más de 800 empresas que han confiado y contratado a tantas mujeres en México y cada país donde existimos.
Diseñar e implementar soluciones y experiencias digitales no solo genera un valor agregado y maximiza el retorno de inversión para las empresas, sino que promueve el ingenio de los distintos equipos, que saben que cuentan con el personal adecuado para hacer de sus ideas una realidad. Es ahí donde reside una de las mayores ventajas competitivas de cara al 2022.