Todos deberíamos tener la capacidad de elegir dónde trabajar, vivir o incluso, cuánto ganar.
Aunque tenemos, en teoría, la libertad de hacer lo anterior mencionado, dependemos de nuestras habilidades y entendimiento sobre la demanda del mercado laboral. Las personas que son mayormente reconocidas en sus mercados o industrias y viven esta relación de libertad, tienden a estar más conectadas, encuentran más oportunidades y aceleran sus carreras con menor fricción.
En el mundo del software sucede algo muy parecido.
Destacando que la demanda del mercado tecnológico seguirá creciendo y demostrando que cada industria se vuelve cada vez más dependiente a las personas que saben cómo escribir código, también es relevante decir que no es fácil colocarse laboralmente sin actitud, participación, compromiso y ganas de aprender todo el tiempo.
“Personal Branding” o también llamado “Gestión de Marca Personal” se refiere a tomar control de tu nombre, comunicando tu talento y actividades al exterior, de manera organizada y constante.
Las ventajas pueden incluir encontrar empleo más rápido, invitación a grupos con intereses similares, vender activamente productos y servicios que puedas ofrecer o construir una audiencia que te posicione como experto.
Quiero aclarar que existen desarrolladores que no han necesitado gestionar su marca personal porque su trabajo ha brillado tanto que la atención sucede orgánicamente. Son reconocidos por sus círculos por su gran aportación y son casos excepcionales.
Sin embargo, en un mundo tan conectado, competido y con exigencias particulares, vale la pena decirte que nuestra estrategia debería incluir la proyección de cada paso profesional que realizamos. Las oportunidades no suceden en un “momento puntual”, más bien las vamos construyendo con el tiempo y dedicación, a tal grado que, cuando aparecen, tenemos todo el trabajo previo hecho para cerrar y avanzar.
Es por ello que la construcción de portafolios y puntualmente la gestión de una marca personal debería ser una prioridad en nuestra estrategia de crecimiento.
1. Define tu carrera empresarial: El mundo del software es muy grande, innovador y diverso. Te darás cuenta que existen muchos caminos y cada uno tiene sus particularidades.
No importa cual tomes, al final, vale la pena que armes tu CV a 10 años.
¿Cómo funciona?
Te invito a trazar en papel y luego transcribir en digital:
Hazlo de manera ascendente, como si ya hubieras vivido todos esos puestos y cuestiónate qué acciones deberías hacer diaria, semanal, mensual y anualmente para alcanzar esos niveles. Es un ejercicio muy interesante porque éste CV del futuro te dará confianza, los temas y habilidades que debes dominar y los eventos, personas y contenidos con los cuales deberías conectar.
Es muy seguro que no suceda tal como lo planees al inicio. Y está bien. La intención es tener la idea principal de tu carrera y revisar mensualmente si te estás acercando a esas metas.
Haz tu CV profesional a 10 años.
2. Crea un sitio web personal: Una vez que tengas una idea más clara de lo que te gustaría llegar a ser, sigue la construcción de tu sitio.
Un sitio web personal va más allá del egocentrismo y los reclutadores. Es para ti.
Debe ser un lugar que te guste y que al mismo tiempo, proyecte ganas de navegarlo.
Tú decides cómo trabajarlo. Qué mostrar y lo mejor de ti.
Deberás comprar un dominio. Prueba namecheap.com para ello.
¿Hosting? Prueba GitHub Pages.
Adicional, conoce bestfolios.com, un sitio donde múltiples desarrolladores han subido sus portafolios y pueden ser un centro de inspiración para ti.
¿Qué puedes incluir en tu sitio?
3. Distribuye valor: El sitio que acabas de construir deberías publicarlo cada vez que puedas con contenido nuevo. Aprovechar: Facebook, Instagram, Twitter, Linkedin, GitHub
Cada aprendizaje, situación o experiencia que pudiera parecerte “normal”, es probable que para otras personas sea espectacular, intrigante o muy interesante.
Pueden ser artículos, videos, fragmentos de opiniones e ideas fundamentadas, fotografías de tu participación en eventos, etc.
Publicarlo en redes sociales implica que te gusta y amas tu trabajo, que te preocupa que el sector siga desarrollándose y que eres libre para promoverlo.
Insisto, no es una cuestión de ego, se relaciona con valor agregado.
La intención no es tener una interacción de cada persona que te ve, es más bien permanecer en su cabeza si en algún momento necesitan una recomendación, opinión o ideas sobre el tema que tú conoces ampliamente.
En Laboratoria, promovemos enormemente el talento tech femenino y ayudamos a las empresas a introducirse en el mundo digital de manera segura y ágil con nuestros entrenamientos corporativos.
Si hay algo que hemos aprendido en el camino es denotar estar presente y exponer nuestra misión todo el tiempo para atraer a más organizaciones que quieran superarse.
En gestión de marca personal, sucede lo mismo. Estar presente te permitirá atraer a más personas sincronizadas contigo.
No significa que si no haces esto, no brillarás ni llegarás lejos. No creo que suceda así. Tampoco considero que exista una fórmula secreta para alcanzar tus metas.
Sin embargo, si te expones más, promueves tu conocimiento, le permites a la gente encontrar tus aprendizajes y estás entregado a tu audiencia, comunidad y personas interesadas en tu contenido, tienes mejores probabilidades de encontrar crecimiento acelerado.
Haz la prueba. Experimenta y mide tus resultados.